Descripción
Agustí Vilaret fundó Mont-Ferrant en el año 1865 en la localidad de Blanes. Había vivido en las Antillas durante treinta años y hacía poco que había vuelto a su tierra, no para vivir de renta, como era costumbre de los americanos que habían conseguido hacer fortuna más allá del Atlántico, sino para invertir ilusión y talento en un proyecto que para él sería una experiencia nueva y singular: la elaboración de Cava.
Al poco tiempo, Vilaret contaba con una notable extensión de viñedos replantados, había construido su propia bodega y disponía de la tecnología necesaria para elaborar esta bebida deliciosa. Sus Cavas y éste en particular, son un homenaje al pueblo de Blanes. Un Cava rico en aromas cítricos y de corteza de árbol, hierbas aromáticas (tomillo, romero), de finas burbujas y con un toque ahumado muy muy sutil.
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