Esta semana, y más concretamente este Lunes 8 de Marzo, se ha celebrado el Día Internacional De La Mujer. Y desde aquí queremos dejar unas palabras de admiración y agradecimiento a todas nuestras guerreras: Inés, Rocío, Verónica, Mariló y Carmen y en especial a mi madre y a mi hermana Maribel.
De mi madre que puedo decir, trabajadora incansable, adelantada a su época y la culpable de que estemos en este proyecto desde hace más de 35 años.
También recordar a Maribel de forma especial, y me tengo que remontar a muchos años atrás cuando nos metimos en la aventura de abrir Tierra Nuestra Huelva. Son más de 20 años y lo que no podríamos llegar a pensar es que nuestra hermana Maribel, al poco tiempo, se involucrara en el proyecto al 100%. Con ello no solo ganó Tierra Nuestra, sino que todo el mundo del vino descubrió a una mujer única en su trabajo diario, La primera distribuidora de vinos independiente en el sector, exigente al máximo con una personalidad arrolladora. Sus visitas continuadas a las mejores bodegas del país son reconocidas, su asistencia a todos las ferias y eventos del sector no está completa hasta qué Maribel es vista por los distintos stand trabajando. Sus continuas catas y horas de formación a la hostelería es soberbia. Sus cenas y almuerzos con Bodegas en la ciudad de Huelva se cuentan por éxito las asistencias. Su apoyo y descubrimiento de nuevas bodegas es sonado.
En definitiva, su trabajo y dedicación es ejemplo de todas las mujeres y hombres que trabajamos en Tierra Nuestra y en todo nuestro competitivo gremio del mundo del vino. Es por ello, que queremos dar las gracias a todas las mujeres que trabajan en este sector ya que sabemos lo difícil que es prescribir vino, botella a botella.
¡Ole! por todas esas mujeres que supieron abrir el camino a otras tantas mujeres que hoy, como nosotros, se han ganado todo nuestro reconocimiento.